miércoles, 4 de enero de 2012

Igualitos, igualitos

¡Vaya sociedad tenemos!
Igualita, igualita a la japonesa. Estaba oyendo un programa de la emisora RAC1 llamado Versió RAC1, uno de los pocos de esa emisora que puedes oír sin sentirte diferente por no ser del Barça o nacionalista. Un programa entretenido y que informa. Os lo recomiendo.
Hoy entrevistaban a una corresponsal en Oriente (no recuerdo de que medio)  pero es de esas que ves que viven lo que hacen y lo hacen bien, o al menos me ha dado esa impresión. Comentaba la periodista que una de las cosas que más le llamó la atención de Japón es que los ciudadanos anteponen el bien común o de la sociedad al bien propio. Explica que tras el terremoto y posterior tsumani con desastre nuclear incluido, las autoridades niponas informaron a la población de que se produciría una disminución en la producción de energía y que, con casi total seguridad, se tendrían que racionar los consumos electrícos y que incluso se producirian apagones en las siguientes 2-3 semanas.
¿Y que hicieron los japonesitos? Pues dejaron de consumir. Apagaban las luces, empezaban a trabajar antes para aprovechar la luz diurna, encendían la calefacción lo mínimo...tras este arrebato de ahorro social se consiguió evitar los recortes anunciados por el gobierno, todo gracias a la acción solidaria de un pueblo que se une ante la adversidad.
Me pregunto ¿qué  hubiese pasado en España? A las dos horas del desastre natural, que nadie podía prever, saldría algún portavoz de la oposición pidiendo explicaciones del porqué se no se había informado ya a la población de las consecuencias del maremoto, se buscaría un culpable político (como si un terremoto de nivel 8 no fuese suficiente). Se diría, con voz altiva y sin complejos lo que se debía haber hecho.
Los sindicatos clamarian al cielo por no haber construido las centrales, las casas o carreteras con unas medidas que ni la NASA al hacer el transbordador espacial, se solicitaría ipso facto la declaración de zona catastrófica, y como no, la joya de la corona de los peticionarios españoles, se reclamarian subvenciones a troche y moche pa to el mundo...por pedir que no quede, que papá estado lo pague todo. 
Y por supuesto seguiríamos a lo nuestro, que esto de tomar medidas de gratis no va con nosotros. Si no hay luz...que pongan mas palos o nos traigan un generador (pero de los que no hacen ruido que si no ponemos una denuncia y salimos en España Directo). Si se corta el agua...que la traigan con camiones, pero que no tenga mal sabor y que la dejen cerca de casa. Y no lo dudes...a poco que pudiésemos el consumo seria igual o mayor, ande yo caliente y ríase la gente. Aquí somos así, egoístas, y quien diga que no miente como un cosaco.
En estos tiempos de crisis lo único que sabemos hacer es quejarnos, pedir más y más: ahora los sindicatos piden ayudas para que los jóvenes se emancipen. Si no trabajan y no cobran ¿cómo van a pagar un piso? Vale, ayuda para el alquiler de nuestro bolsillo pero ¿y todo lo demás? ¿No es más lógico colaborar dentro de una misma estructura familiar? Qué manía con que los jóvenes tienen que irse de casa de papá...yo me fui a los 28 años y con la carrera acabada y tras aprobar el MIR, lo lógico creo yo, y NO ME PASO NADA, NO TENGO NINGÚN TRAUMA
Otro ejemplo de incivismo lo comentan también en el mismo programa. El Ajuntament de Barcelona gastó el año pasado 2,2 millones de euracos en limpiar pipis y popons de los guarros que decidian evacuar y aliviarse en plena calle. Dice la corresponsal ya mencionada que es muuuuy difícil ver a un japonés hacer sus necesidades en la vía pública...pues como tiene que ser, eso NO DEBERIA SER LO EXTRAÑO. 
Es vergonzoso que un grupúsculo de "ciudadanos" campen por sus anchas haciendo lo que les place y donde les place. Seguro que algunos de estos son lo que luego acampan en determinadas plazas públicas para manifestar su disconformidad con el sistema...pues me parece muy bien (o no) pero ¡a mear a tu casa guapo que eres un guarro! Me toca las narices pensar que alguno de los euros que yo pago al ayuntamiento de  mi ciudad vayan destinados a limpiar defecaciones varias...¡uf que escatológica estoy!
Bueno, ya veis, deberíamos aplicarnos el cuento japones y hacer en lugar de quejarnos, o por lo menos podríamos quejarnos pero haciendo alguna cosa.
Eso es lo que yo creo y ...no tiene por que gustarte.

1 comentario:

  1. Comparto una parte de lo que dices pero no todo. Seguro que inicialmente, esa forma de actuar hipotética del españolito medio iría por ese camino. Es una inercia que creo/espero que la crisis cambie (crisis=momento de oportunidades para mejorar; no solo tiene que ser algo negativo) pero es un pueblo ambivalente, el español; sorprende lo solidario que es a la hora de recoger ayuda en casos de catástrofes o con el tema de los transplantes. Según como se le toque la fibra...el problema es que esas actitudes son emocionales (positivas, pero emocionales), en cambio, la de los japoneses es racional. Si pudiéramos aunar lo mejor de una y otra actitud tendríamos a una sociedad sobresaliente.
    Veo brotes de racionalidad en algunos sitios/grupos de personas (en Cataluña, tras la última sequía parece que se mantiene el ahorro (o no despilfarro) de agua; en estos últimos meses un grupo heterogéneo de médicos, la mayoría de familia, han iniciado unas iniciativas en la red 2.0 dignas de mención respecto al raciocinio).
    Voto por quejarnos/indignarnos pero haciendo algo al respecto; crítica constructiva; dar alternativas,...como dices al final.

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